Las empresas deben velar por la calidad de los productos y servicios que ofrecen, a fin de garantizar su confiabilidad y permanencia en el mercado. Se trata de la gestión de calidad.
¿Sabías que existen profesionales encargados de diseñar planes para evitar errores de producción? Esta fascinante área de estudios, relacionada con la ingeniería industrial, toma cada día mayor importancia en un mundo donde los consumidores son cada vez más exigentes.
¡Sigue leyendo y conoce qué es la gestión de calidad y algunos consejos para ponerla en práctica!
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Podemos definir la gestión de calidad como los procesos para evitar errores o fallas en cualquier producción de productos o servicios.
Asimismo, constantemente busca su mejora utilizando herramientas y metodologías, por ello se considera un área imprescindible dentro de las organizaciones que quieren mantenerse competitivas.
Esto porque si la calidad es uno de los principales factores de fidelización de tus clientes… y al contrario, si los estándares de un producto son bajos, se corre el riesgo de que el mercado opte por otras opciones.
La gestión de calidad tiene 7 principios fundamentales que son regidos por la norma ISO-9001, que busca estandarizar los requisitos de la gestión de calidad.
A continuación te describimos los principios de la gestión de calidad, acompañados por algunos consejos para ponerlos en práctica.
El enfoque al cliente busca cumplir y exceder las expectativas del mercado tomando en cuenta sus necesidades.
Con este enfoque, tu cliente verá más valor dentro de tus productos.
Para ponerlo en práctica, se debe buscar entender las necesidades de los clientes y enfocar los objetivos de la organización hacia ese camino. Es decir: no buscar un mercado para nuestro producto, sino ofrecer un producto adaptado a nuestro mercado.
Establece una pauta de trabajo que brinde orientación en el quehacer de la empresa. De esta forma, la organización podrá alinear sus estrategias y procesos.
Se debe incluir a todas las personas involucradas en la producción y puesta en el mercado de tus productos/servicios.
Y es que la motivación es un gran activo de las empresas, pues permite lograr las metas de trabajo. Este principio se puede poner en práctica facilitando el diálogo abierto y propiciando el trabajo colaborativo.
Evaluar procesos para optimizarlos y descartar aquellos pasos que no agregan valor a tu producto o servicio es indispensable en la gestión de calidad.
Busca mantener el nivel de desempeño esperado implementando pruebas continuas.
Cuando tienes información real y oportuna sobre tu posición en el mercado y la mente de los consumidores, tienes mayores oportunidades de tomar las decisiones correctas (basada en hechos, no en suposiciones).
Fomentar las relaciones crea valor en las partes interesadas en mejorar el desempeño de la organización.
Para poner en práctica este principio, es necesario conocer las partes interesadas (clientes, socios o proveedores) y su relación con la organización.
¿Qué te han parecido la gestión de calidad? Si te gustaría dedicarte a esta área, la Ingeniería Industrial es una carrera que debes considerar. Descubre qué tiene para ti en nuestro material: